1. Todos los países quieren vivir según el estándar de vida europeo. Mientras solamente 400 millones de personas vivían en el lujo, la abundancia y el confort, éste era sostenible... a costa de que 1.600 millones vivieran en situación de atraso. Pero el problema es que los 4.000 millones de habitantes actuales del planeta, todos, sin excepción quieren vivir, no sólo como europeos, sino como millonarios europeos. Y esto no es sólo un deseo: los países más poblados, Brasil, Bangladesh, China e India, están camino del pleno desarrollo. No hay recursos suficientes en el planeta para alimentar ese desarrollo.
2. El petróleo se acaba, no hay energías de sustitución. Hoy se consume más petróleo del que se descubre. Esto ocurre desde los 70. Así pues, el petróleo se va agotando y cada vez su extracción es más cara. A pesar de que se logren descubrir yacimientos todavía no localizados -lo que parece improbable- el petróleo está en vías de extincióna y las previsiones sobre cuando se bombeará la última gota oscilan entre 30 y 50 años los más optimistas. Luego nada. La energía de fusión es todavía un mito, las energías renovables supondrán como máximo el 15% de la energía consumida. ¿Energía nuclear?... Hay uranio para 30 años, nada más.
3. El cambio climático fundirá los polos y generará una nueva era glaciar. El efecto invernadero genera el deshielo de los polos, esto supone un flujo anómalo de agua dulce en la corriente del golfo que regula la temperatura en Europa Occidental. Así pues, de consumarse el deshielo de los polos, a nosotros nos corresponde una nueva era glaciar. La buena noticia es que los que hoy vivan a 1.500 metros de la costa, se encontrarán en primera línea de costa si las aguas suben solamente un metro de altura.
4. Las guerras del petróleo se sustituirán por las guerras del agua. Ya ha habido anticipos: el conflicto árabe-israelí es un conflicto por el agua, en Iraq, Pakistán e incluso entre la Generalitat de Catalunya y la de Valencia, por el trasvase del Ebro, estamos asistiendo a conflictos del agua que cada vez se endurecerán. Para colmo, el cambio climático agota los acuíferos subterráneos, la deforestacion genera sequía y la contaminación de las aguas las hace imbebibles.
5. No hay desarrollo sostenible. Desde la Conferencia de Río nos han engañado: nos vendieron la idea del "desarrollo sostenible". No existe. Para una población de 4.000 millones de habitantes no hay desarrollo que sea sostenible, cualquier forma de desarrollo implica una alteración del ecosistema y una degradación del medio ambiente. La idea del desarrollo sostenible implica "crecimiento moderado"... pero no puede haber crecimiento infinito (por moderado que sea) para unos recursos del planeta que si... son finitos.
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