Película: Proxima
Año: 2019
Duranción: 107 min.
País: Francia
Dirección: Alice Winocour
Guion: Jean-Stéphane Bron, Alice Winocour
Fotografía: Georges Lechaptois
Reparto: Eva Green, Matt Dillon, Zélie Boulant, Lars Eidinger, Sandra Hüller, Jan Oliver Schroeder, Nancy Tate, Marc Fischer, Alexey Fateev, Vitaly Jay, Birger Frehse
Productora: Dharamsala / Pandora Films
Género: Drama. Acción | Aventura espacial. Familia
Premios: 2019 Festival de San Sebastián: Premio especial del Jurado.
Interstellar (2014) de Christopher Nolan, The Martian (2015) de Ridley Scott, Gravity (2015) de Alfonso Cuarón. Salyut-7 de Klim Shipenko. Ad Astra de James Gray, entre un montón más, son películas estrenadas en los últimos años sobre el tema de la astronáutica y la conquista del espacio.
Le tocaba el turno a la Agencia Espacial Europea promocionarse en el mundo del cine. Y lo hace con esta producción, bastante menos espectacular que las anteriores y, significativamente, más intimista. Si el cine estadounidense ha explorado en múltiples ocasiones los horizontes espaciales, a menudo con grandes medios en efectos especiales y heroísmo talla XXL, esta película es casi es un publireportaje para que las mujeres se animen a participar en las misiones espaciales que están por llegar.
SINOPSIS
La francesa Sarah Loreau (Eva Green) es una astronauta francesa que se entrena en la Agencia Espacial Europea, en Colonia. The European Space Agency (ESA). Allí vive con Stella (Zélie Boulant), su hija de siete años.
Su hija de siete años, sufre dislexia (dificultad para la lecto-escritura), disgrafía (dificultad para aprender a escribir correctamente) y discalculia (dificultad para aprender matemáticas).
Sarah acoge entusiasmada la noticia de que ha sido elegida para la misión "Proxima", junto al estadounidense Mike (Matt Dillon) y el ruso Anton (Aleksey Fateev).
Al ser la única mujer del programa, siente la presión de sus compañeros, especialmente de Mike Shanon, además de la profunda tristeza de vivir durante un año separada de su hija, ya que va a formar parte de una misión que la alejará de nuestro planeta.
A pesar de que ese viaje espacial ha sido el sueño de Sarah durante toda su vida, este reto pondrá a prueba la relación entre esta madre astronauta y su hija, que deberán sobrevivir, en más de un sentido, al peligro de esta misión.
Retrato a Sarah
- Sarah es una mujer decidida, pero a la vez frágil e insegura, cuya racionalidad y profesionalidad, gradualmente, deja espacio para el lado más humano y maternal, hasta lo obsesivo.
- Sarah nos impresiona haciendo pruebas físicas exigentes, revisiones médicas, adaptación de exoesqueletos, etc... en la Agencia Espacial Europea.
- De niña soñaba con tocar las estrellas viajando hasta ellas.
- Sarah habla de que su madre no creía que la profesión de astronauta fuera para mujeres. Dado lo cual no era relevante para ella el que su hija se dedicara a prepararse para ser cosmonauta. No se veía valorada por la madre y comparaba eso con un abandono y una herida en su autoestima
- Al igual que los maltratadores generan hijos maltratadores, las madres controladoras generan también hijas igualmente controladoras. Este patrón que había sufrido Sarah con su madre, lo repite con su hija.
- Me resulta curioso que la astronauta no haya hecho una prueba antes, para saber si estaba preparada en separarse de su hija 1 año.
- Está separada de su marido y le cuesta confiar en su ex para el cuidado de su hija. El padre, un astrofísico alemán.
- El cordón umbilical de la madre con su hija es más intenso que el de la propia hija con su madre porque es consciente de la transcendencia de viajar al espacio durante un año.
- Una de las cosas más increíbles de la película es que la protagonista boitocea las medidas de seguridad biológicas y las de confidencialidad durante una cuarentena, durante unos entrenamientos, durante un aislamiento.
- El reto para Sarah no es la culpabilidad como apunta la directora Alice Winocour sino dejar de controlar a su hija.
- El poder de controlar a su hija, es siendo Sarah una sumisa, una consentidora a todo lo que pida la niña.
Directora
- El trabajo de la directora y co-guonista, Alice Winocour, es estupendo.
- La directora según su opinión es que quiere reflejar, que la separación de la protagonista con su hija, es a su vez la separación de la Tierra.
- Winocour muestra que descubrir el apego de Sarah con su hija no entraba en sus planes.
- A lo largo de la película, sentimos la ansiedad de la separación que experimenta Sarah cuando su hija, Stella, no está presente en algunos momentos importantes previos a la misión.
- La omnipresencia de la hija socava el profesionalidad de Sarah hasta el punto en que podemos cuestionarnos el por qué los directivos de la ESA no la retiran de la misión dada su incapacidad evidente para manejar psicológicamente la separación de un año.
- La directora desarrolla un cuidado drama familiar, que supone un homenaje a las mujeres astronautas.
La Película
Proxima se ha rodado en las instalaciones de ESOC (centro de seguimiento y control de las misiones de la Agencia Espacial Europea), en Darmstadt - Alemania, en Star City (centro de entrenamiento de astronautas en Rusia) y en el Cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán (base de lanzamiento de los Soyouz).
La conclusión, tras el visionado de la película, es que no existe ni el astronauta perfecto, ni la madre perfecta.
Al fin y al cabo, lo importante es ser libre para tomar las propias decisiones, aunque, a veces, elegir resulte diabólico.
Su narrativa pausada y es necesaria para poder conectar con los sentimientos de ambas partes.
Lo que Proxima presenta al público es un testimonio bien documentado, respaldado por imágenes tomadas gracias a agencias espaciales internacionales, de lo que es ser una mujer y madre en el mundo profesional de la conquista del espacio.
Proxima escrita por Alice Winocour y Jean-Stéphane Bron, lleva al espectador a conectar con la realidad de los sentimientos entre madre e hija, sentimientos que nublan la razón y conquistan el corazón de la maternidad.
A medida que pasan los minutos, se va teniendo la sensación de que la película, como la nave espacial, no acaba nunca de despegar, pese al minucioso retrato de los prolegómenos de cualquier misión espacial. Todos los aspectos sobre la preparación de los astronautas, intentan ser lo más fieles posible a la realidad: los entrenamientos, las pruebas médicas, la cuarentena, el miedo de las familias, la certeza de que la vuelta será mucho más dura que la partida y la constatación de que nadie, en definitiva, es imprescindible.
Finalmente, Próxima funciona como drama reparador materno filial, más un adecuado ensayo sobre la conciliación.
Actores
Excelente trabajo de Eva Green, un Matt Dillon demasiado canalla para el papel, dentro de un reparto de rostros europeos conocidos, como es el caso de la actriz alemana Sandra Hüller, y la niña Zélie Boulant
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