Freddie, una chica coreana adoptada, llega a Seúl de manera inesperada tras ser cancelado su viaje a Tokio. Allí intentará contactar con sus padres biológicos por curiosidad, siendo sólo su padre el que conteste y que para ella será una decepción debido a su alcoholismo. Dos años después veremos cómo Freddie sigue en Corea del Sur y lleva un camino de autodestrucción donde sigue ignorando los mensajes de su padre y donde ya ha recibido una respuesta de su madre biológica que no quiere conocerla…
Película bastante irregular que nos presenta un personaje con el que es difícil empatizar debido a su carácter infantil y egoísta. Durante su estancia en Seúl seremos testigos de su crecimiento como persona y autodescubrimiento, para lo bueno y para lo malo. La película resulta excesivamente fría para lo que se quiere contar y eso puede afectar al visionado de muchos espectadores.
Nuestra puntuación: 6 sobre 10
© Martín Blázquez
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